Canonización de la Madre Teresa
En la Plaza San Pedro,
frente a cien mil personas que acompañaron la ceremonia con banderas, imágenes, colores,
gritos de alegría y mucha emoción,
el Papa Francisco proclamó que Madre teresa es SANTA.
Esta mujer, que en 1979 recibió el Premio Nobel de la paz,
es la protectora de todos los voluntarios católicos que cuidan de los más necesitados.
Nacida en Skopje, capital de Macedonia, de una familia albanesa originaria del Kosovo en 1910,
hizo su noviciado en Irlanda, fue enviada por su orden a la India, adonde llegó en 1929. Enseñaba en una escuela para chicas de familias ricas,
pero “sentí el llamado de Cristo hacia los más pobres”.
En 1946 creo la orden de las Hermanas de la Caridad para dedicarse a la ayuda de los últimos y especialmente de los miles de moribundos que yacían en las calles de Calcuta.
A ella que nos cuida y nos asiste desde el Cielo, bien cerquita del Corazón de Jesús y de María, le pedimos por las necesidades de nuestra familia.
Sabemos que no se va a quedar de brazos cruzados, sino que va a llevar nuestras peticiones a su amado Jesús.
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