El domingo 3 de diciembre, hasta el domingo 24 del mismo mes, caminamos en un tiempo especial.
Es el tiempo de ADVIENTO, en el que esperamos la VENIDA de Jesús.
No es una espera pasiva, aburrida, dormida. Es una espera activa, alegre, atenta.
Sobre todo, debemos estar atentos: a las necesidades de nuestros hermanos, atentos para sembrar esperanza, para realizar gestos concretos de amor que hagan presente a Jesús en nuestra vida cotidiana.
Y como debemos "velar", cada domingo de Adviento encendemos una vela hasta completar las cuatro velas de la Corona de Adviento.
Con cada vela encendida le pedimos a Jesús por las intenciones y necesidades de nuestra familia.
Mientras caminamos este tiempo tan hermoso decimos juntos: ¡VEN, SEÑOR JESÚS!
Y si somos creativos y nos gusta recortar, pegar, diseñar... ¡podemos armar una corona para decorar el hogar! Aquí te mostramos dos modelos:
Es el tiempo de ADVIENTO, en el que esperamos la VENIDA de Jesús.
No es una espera pasiva, aburrida, dormida. Es una espera activa, alegre, atenta.
Sobre todo, debemos estar atentos: a las necesidades de nuestros hermanos, atentos para sembrar esperanza, para realizar gestos concretos de amor que hagan presente a Jesús en nuestra vida cotidiana.
Jesús nos llama a VELAR, a no quedarnos dormidos, a descubrirlo presente y necesitado en nuestros hermanos.
Y como debemos "velar", cada domingo de Adviento encendemos una vela hasta completar las cuatro velas de la Corona de Adviento.
Qué lindo sería ir a misa en familia cada domingo de Adviento, para encender junto a la comunidad cada vela de esta corona.
Y si somos creativos y nos gusta recortar, pegar, diseñar... ¡podemos armar una corona para decorar el hogar! Aquí te mostramos dos modelos:
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